Egreso
Edith Castelli junto a sus dos
compañeras Elena Lizárraga y Candelaria Teruel defendieron su tesis de grado
denominada “Experiencias artísticas extracurriculares en la Universidad
Nacional de Salta” a fines de Diciembre de 2015.
Por María Chachagua
Edith Castelli,
también conocida como “Gogui”, ingresó a la Facultad en el año 2010, con muchas
expectativas y ganas de hacer una carrera universitaria, “en realidad elegí Ciencias
de la Comunicación casualmente, quería
una carrera que no tuviese matemáticas,
entonces mi fijé en las de Humanidades y ahí me decidí” recuerda.
Gogui tuvo que
ingresar a través del programa de AM25, que es un curso integrador para los que
tienen más de 25 años y tienen los
estudios secundarios incompletos. “Yo
había terminado de cursar mi secundario pero me quedaron colgadas dos materias
sin rendir, ya que me casé, y luego
vinieron los hijos; entonces quedó estancado
el sueño de ir a la universidad” nos comenta. Sin embargo, el paso de los años y de la vida
no le quitó a Gogui la posibilidad de concretar ese proyecto. “Luego de mi
divorcio decidí estudiar y cumplir mi sueño” comenta. Cuando comenzó a cursar,
sentía que todo era nuevo, hasta ese momento nunca había pisado la Universidad.
“El primer día tenía mucho temor, me sentía rara, pero estaba feliz; casi todos
mis compañeros podrían ser mis hijos y mis profes casi de mi edad o más jóvenes
incluso” relata sonriente.
Esta nueva
experiencia para Gogui fue todo un desafío en el que tuvo que sacar fuerzas y
enfrentar cada obstáculo que se le presentaba.
Era tan grande su deseo de estudiar y de superarse, que puso todo su esfuerzo. “No bajé los brazos nunca, me sentí desde el
principio que estaba como en casa, mis compañeros y mis profesores son como mi
familia, disfrute muchísimo cada momento, aun cuando me agarraba la desesperación por
cumplir con todas las materias, no falté casi nunca a una clase. Me sentaba
adelante, escuchaba y tomaba notas, así podía entender mejor los textos “recuerda
emocionada.
En cuanto a lo
positivo de la Universidad, Gogui destaca haber conocido y compartido con
nuevos compañeros, muchos de los cuales se convirtieron en amigos; también reconoce
haber aprendido sobre política y dejar de lado esa representación de que es algo
malo sino todo lo contrario. En cuando a lo negativo, reconoce que los horarios
son muy desordenados, y que al vivir en zona sur de la capital, no podía volver
a su casa; entonces tuvo que pasar muchas horas en la Universidad. A pesar de esto, Gogui finalizó la cursada en
tiempo y con muy buen promedio. La nueva licenciada también nos comentó sobre
su visión de la carrera y remarcó la necesidad de afianzar la parte práctica,
poder estar más en contacto con la radio por ejemplo, o tener otros talleres o
cursos de especificación como oratoria, edición, locución, etc.
La tesis de grado la realizó junto a dos compañeras, Elena
Lizárraga y Candelaria Teruel; trabajaron acerca de las formas de comunicación
a través del arte. Su directora de tesis
fue Geruza Queiróz Coutinho de la cátedra de portugués con quien habían
participado de un coro y de un programa en Radio Universidad denominado
“Lenguas en sintonía”. La co-dirección estuvo a cargo de Catalina Buliubasich.
En cuanto a sus
planes futuros, Gogui nos comenta que su deseo es seguir vinculada de una
alguna manera a la Universidad “me gustaría trabajar en algún lugarcito, donde
pueda ser útil y devolver en parte todo lo que recibí”. Su intención es seguir
trabajando en Radio Universidad, este año presentará su propio proyecto radial.
“Amo la radio, para mi tiene una magia, algo especial, me siento muy cómoda en
ese lugar, quiero seguir con esto y llevar luego el programa a una radio
comercial también” afirma.
Finalmente Gogui
les recomienda a todos los estudiantes ser persistentes y dar su máximo
esfuerzo. “No hay otra forma de terminar la carrera que estudiar, estudiar y
estudiar; ser perseverante, no
atemorizarse porque fallaste en un parcial o un final; volver a intentar, pedir ayuda a los
compañeros, a los chicos que ya están en años más avanzados, a los profesores.
No se recibe el más inteligente, sino el más perseverante” finaliza orgullosa.